
Los condenados guardan prisión en el centro penal de San Francisco Gotera. Foto: Wilson Urbina.
El Juzgado especializado A de San Salvador condenó a 385 años de cárcel a siete pandilleros por la masacre ocurrido en el canton Agua Escondida, de San Juan Opico el pasado 3 de marzo del 2016.
El Tribunal decidió creerle al testigo "Islámico" y condenar a 35 años de cárcel por cada persona asesinada más cinco años por el delito de organizaciones terroristas.
Ayer, durante el juicio el testigo "Islámico" incriminó a siete de sus excompañeros del barrio 18, facción revolucionarios en la masacre que propició las medidas extraordinarias de seguridad.
El testigo, quien era el segundo palabrero de la pandilla, declaró sin distorsionador de voz, aunque el fiscal del caso José Ernesto Castaneda, en lugar de solicitarlo directamente, optó por preguntarle al juez Godofredo Salazar si utilizarían esta herramienta, a lo que el funcionario le respondió que no, porque estaban frente a una persona que había tenido una participación directa en el hecho.
Fiscal General, Douglas Meléndez, complacido con la contundente condena de 390 años de cárcel a pandilleros por masacre de San Juan Opico pic.twitter.com/6ubW3cPFZx
— Fiscalía El Salvador (@FGR_SV) May 24, 2017