
Disney podría recibir la suma de 47 millones de euros (50 millones de dólares) por la muerte de Carrie Fisher, actriz de la saga Star Wars, de acuerdo con la publicación de la revista especializada The Insurance Insider, compañía, que compró Lucasfilm en 2012.
Resulta que Disney firmó una póliza de seguros con Lloyds para protegerse en caso de que la actriz no cumpliera su contrato y, debido a su muerte, el pasado 27 de diciembre, exactamente, esto no sucederá.
Fisher, que saltó a la fama por interpretar a la princesa Leia en Star Wars, había firmado para aparecer en la nueva trilogía de la saga. En el Episodio VII, Star Wars lo logró, luego se confirmó que acabó de rodar todas las escenas para el filme que se estrenará en diciembre de este mismo año, el Episodio VIII.
La estadounidense, de 60 años, no llegó a trabajar en la tercera película de Star Wars. Según la revista, la compañía ya está preparado el pago para Disney.
Eso sí, Disney podría poner en marcha la tecnología y hacer aparecer a Fisher en las escenas, para que los fans no sufran.